Rodeado de montañas y con vistas a la inmensidad del Mediterráneo, existe un entorno que nos cautiva: con sus aromas, sus colores y sus texturas, detalles que nos han servido de inspiración para crear el diseño de este proyecto, que invita a disfrutar de una extraordinaria conexión con la naturaleza.

Bajo la calidez del sol, observamos cómo la luz cambia: desde el amanecer, apareciendo entre las montañas e iluminando suavemente cada rincón, hasta el atardecer, donde acaricia el mar y llena de tonos anaranjados el cielo, escondiéndose para dar paso a la noche. Acompañando este espectáculo natural, presentamos distintos espacios de exterior que encajan a la perfección con su alrededor, y espacios interiores que invitan a admirar las vistas y, al igual que sucede con el entorno, transmiten una calma y bienestar conmovedor.

Los materiales de carácter orgánico elegidos, como la madera, la piedra y los tejidos naturales que utilizamos para crear los distintos ambientes, convierten este lugar en un hogar cálido y acogedor.

Los colores neutros del mobiliario nos permiten fusionar el interior y el exterior, siempre acompañando al paisaje sin robarle protagonismo, convirtiendo el conjunto en un lugar incomparable.